Perú 1942 - 1963

Recuento del Año

Una vez terminado
el año,
procedo a recoger
  mis cosas nuevas,
   procedo a reclamar
papeles viejos,
hago al compás
de charlas amistosas
el recuento del año,
  el recuento de mis
  365 días pasados:
todo se fue
rápidamente,
no hubo tiempo
para la cosecha,
ni  para
sembrar el trigo
en los maizales.
Los días volaron
raudamente,
estuve sentado,
leyendo,
o alguna vez
escribiendo
hasta la noche.
No tuve miedo
de la muerte,
no pude sembrar
el amor como
quería,
recogí algunas
frutas caídas
y supuse que
al final moriría
alguna tarde
entre pájaros
y  árboles.

  No estoy muerto.
sin embargo,
  entre tarde y tarde
cuando vibran
los soplos
del silencio,
abro mi corazón
al conjuro
  del viento
    y la palabra,
    y construyo
casas,
tierras,
mares,
nuevos albores,
nuevas tristezas,
y callo al final

(como siempre
recordando y
recordando).